FORO : GÉNERO Y VIOLENCIA
29 - 30 DE NOVIEMBRE y 1 DICIEMBRE
El Proyecto Regional del PNUD "América Latina Genera" y el “Programa Regional Ciudades Seguras: violencia contra las mujeres y políticas públicas” de UNIFEM, tienen el agrado de invitarles a participar en el Foro virtual sobre Género y Violencia en América Latina que se realizará entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre.
Este Foro, se realiza en el marco de la Campaña Interagencial 16 días de Activismo, por la eliminación de todas las formas de violencia hacia la mujer, y en conmemoración del día 25 de noviembre.
Las líneas de discusión se organizan en 3 bloques, uno por cada día de foro:
Miércoles 29
Diferentes abordajes de la violencia contra las mujeres. Modera: Red Mujer y Hábitat (SUR, Chile y CISCSA, Argentina).
¿Cuáles son las condiciones que posibilitan que se continúe ejerciendo la violencia contra las mujeres? ¿cuáles son las expresiones de la violencia y el consiguiente temor en las mujeres y hombres, en espacios públicos y privados? ¿Qué abordajes podemos identificar y cuáles son sus limitaciones?
Jueves 30
Violencia contra las mujeres en América Latina. Modera: REPEM
¿Cuál es la tendencia para abordar la violencia contra la mujer en América Latina? ¿Cuáles son los avances y desafíos en el debate en relación con las políticas públicas? ¿Cuál es la situación en las región en relación a las conferencias y convenciones e instrumentos internacionales, contra la violencia de género?
Viernes 1
Disminuir el temor y frenar la violencia. Modera: UNIFEM Colombia
Lecciones aprendidas en la construcción de nuevas estrategias. ¿Qué propuestas están en curso y cuáles son viables para implementarse en el futuro?
Para poder participar será necesario incribirse como ciudadana/o de la ciudad América Latina Genera. El acceso al foro estará visible desde la página de inicio y desde el especial de violencia, a partir del miércoles 29 noviembre (9 a.m. en Chile).
Esperamos su participación
América Latina Genera (PNUD) y Programa Regional Ciudades Seguras: violencia contra las mujeres y políticas públicas (UNIFEM).
EL ABORTO INDUCIDO: UN DERECHO HUMANO
La decisión de la Cámara de Diputados de Chile de declarar inadmisible el proyecto de ley impulsado por los diputados Marco Enríquez-Ominami y René Alinco, que despenaliza el aborto inducido hasta la 12ª semana de gestación, y posteriormente según causales, no hace sino revelar la incapacidad de esta democracia para abordar con honestidad problemáticas de histórica presencia en Chile cual es el aborto inducido, principal causa de muerte materna. Al mismo tiempo, es contraria al espíritu de instrumentos jurídicos internacionales que protegen la vida y salud de las mujeres, los que el Estado chileno ha ratificado.
Más del 65% de la población mundial vive en países donde el aborto se permite sin restricción por razones socioeconómicas, para salvar la vida y salud de la mujer, por violación e incesto, o cuando el feto tiene anomalías gravísimas incompatibles con la vida. Escasos países lo consideran ilegal bajo cualquier circunstancia. Chile es uno de ellos. Sin embargo, los países que han legalizado el aborto inducido y al mismo tiempo ofrecen educación sexual y servicios de regulación de la fecundidad accesibles, apropiados culturalmente, asequibles y entregados en un contexto de respeto y confidencialidad, muestran un descenso significativo en el número de abortos.
En Chile las leyes punitivas, el maltrato que reciben las mujeres con complicaciones de aborto, las delaciones por parte del mismo personal de salud y su posterior encarcelamiento, no han logrado disuadir a las mujeres que optan por interrumpir voluntariamente un embarazo no deseado o inoportuno. Por el contrario, se estima que uno de cada tres embarazos termina en aborto, con un total aproximado de 160 mil abortos inducidos cada año, cifra que incluso puede ser mayor.
Abortan mujeres pobres y acomodadas, adultas y adolescentes, mujeres con estudios y con escasa escolaridad, mujeres que profesan una religión y no creyentes. Pero son las más pobres las que arriesgan sus vidas en procedimientos insalubres y peligrosos, y pueden ser encarceladas. El aborto de las mujeres con mayores recursos, en cambio, no es objeto de juicio o condena pública.
La propuesta de ley de los diputados Alinco y Enríquez-Ominami, por lo tanto, constituye un intento por abordar y ofrecer respuestas frente a este grave problema de salud pública, de derechos humanos y de justicia social. La inadmisibilidad, aprobada por parlamentarios y parlamentarias de diversas tendencias políticas, incluso aquellas que se dicen progresistas y laicas, es una muestra de intolerancia y fundamentalismo que atenta contra la vida y salud de las mujeres, y las desconoce en su calidad de sujetas de derechos, con libertad y autonomía sobre su vida sexual y reproductiva.
Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe, RSMLAC
www.reddesalud.org
DESESTRUCTURANDO LOS DISCURSOS HEGEMÓNICOS
Isabel Margarita Núñez Salazar, en: Mujeres jóvenes y participación política, sernam/injuv, 11 de noviembre, 2006.Hola Buenos Días.
En primer lugar, quisiera dar las gracias, al SERNAM y al INJUV, en especial a Marcia Merino y a Susana Fuentes, por la invitación que me han hecho, para reflexionar sobre la participación política de nosotras, las mujeres jóvenes.
Mi reflexión el día de hoy, la hago a partir de la militancia social y feminista que tengo, en la Coordinadora de Feministas Jóvenes.
La cual es una organización social de mujeres, donde confluimos secundarias, universitarias y profesionales, con el espíritu libertario de construir una sociedad más justa y digna, tanto para mujeres y como para hombres.
Nuestra organización, es un espacio abierto en el que confluyen diferentes formas de vivir el feminismo, donde hemos decidido caminar juntas y revueltas, esforzándonos por encontrar puntos en común, sin despreciar el conflicto cómo ingrediente necesario de toda organización política
Esta forma horizontal de comprender la distribución del poder, nos permite eliminar las envidias y competencias que el sistema capitalista impone.
Por lo tanto, somos mujeres jóvenes y diversas, de distintas edades, que tenemos intereses y deseos en común, logrando hacer del conflicto, una manera de enriquecer aún más nuestra organización, ya que un buen acuerdo, es saber que estamos en desacuerdo.
Es, en ese espacio donde generamos poder, horizontalidad, respeto, amistad, alegría, compañerismo, acuerdos, críticas y reflexiones para la configuración de una realidad social más justa y feliz para todas y todos.
En ese sentido, la organización social de la cual provengo, pertenece al movimiento feminista chileno, que tiene sus inicios en el siglo XIX de la historia de Chile.
En 1875, las mujeres jóvenes de San Felipe, mayores de 21 años de edad, que sabían leer y escribir, decidieron ir a sufragar – votar – para las elecciones presidenciales de ese año. No obstante, al momento de llegar a las urnas, los hombres, vocales de mesa, que estaban en ese lugar, las excluyeron de poder sufragar, porque ellas eran mujeres. Estas mujeres jóvenes, no comprendían el porqué de su exclusión, si en la Constitución de 1833, que regía a nuestro país en ese momento, señalaba, que todos los ciudadanos mayores de 21 años, que supiesen leer y escribir podían sufragar.
Lo que ellas no sabían, era que ciudadano, se relacionaba estrictamente con el sexo masculino, y que por única vez, no tenía esa connotación genérica errada, que señala incluir a mujeres y a hombres. Algo tan parecido, a cuando estamos en la sala de clases y nos enseñan que la historia de la humanidad o del hombre, es la historia de hombres y mujeres.
Luego de la presión que ejercieron estas mujeres en el espacio público, la Constitución de 1833, reconfiguró ese artículo, señalando que no podían votar, las mujeres, los analfabetos y los delincuentes, quedando rezagadas a la misma marginalidad que estos sujetos.
Así, y gracias a la resistencia que estas mujeres de elite ejercieron, se transformaron en el movimiento feminista y sufragista chileno del siglo XX, consiguiendo, ellas, el sufragio universal, que gozamos hasta el día de hoy, el año 1949.
Diez años más tarde, en 1885, las mujeres obreras, en el norte de nuestro país, también se estaban organizando para luchar por sus derechos, el descanso dominical, la igual remuneración que sus compañeros hombres, por el mismo trabajo realizado, además de acceder a una maternidad deseosa y no obligatoria.
Muchas de ellas, fueron grandes precursoras de los movimientos sociales obreros en el Chile del siglo XX, logrando conseguir el código del trabajo el año 1931, el cual se mantiene en la actualidad.
De esta manera, estas mujeres jóvenes y proletarias, se constituyeron en el movimiento feminista obrero de Chile. Que luchó junto con los trabajadores de las salitreras, de las minas del carbón y de las industrias urbanas, las conquistas sociales del siglo XX, como por ejemplo, la Ley de la Silla, la obligación al descanso los días domingos, el pago de las vacaciones, el pre y post natal femenino, entre otros.
Gracias a la lucha social, política y cultural de estas mujeres, hoy nosotras podemos estar debatiendo e ideando una nueva sociedad, una sociedad más justa, más digna y más amable, en donde mujeres y hombres vivamos más felices.
Deseo, rescatar a estas mujeres jóvenes, que constituyen parte fundamental de nuestra historia y memoria, no porque en nuestros colegios, liceos, escuelas, universidades e institutos, se las invisibilizen, sino porque, gracias a su organización en tanto mujeres, lograron conseguir todos los derechos que nosotras, el día de hoy gozamos, y porque, gracias a sus luchas, nosotras, hoy, podemos debatir sobre política.
Quisiera detenerme, en la categoría de mujer.
Ser mujer, tiene que ver, con la heterogeneidad y la diversidad de mujeres que habemos en la sociedad. Mujeres heterosexuales, homosexuales, bisexuales, solteras, viudas, casadas, divorciadas, feministas, católicas, protestantes, jóvenes, adultas, adultas mayores, niñas, adolescentes, indígenas, mestizas, roqueras, folclóricas, reggetoneras y un sin fin de especificidades, que tienen relación con que no todas las mujeres somos iguales.
No obstante, existe una historia que nos une, la cual se relaciona con la construcción de nuestras identidades. Identidades, que por cierto, están en disputa política.
Y señalo en disputa política, porque son Otros, los medios de comunicación, el Estado, la Iglesia, el colegio, el liceo, la familia, quienes deciden cuáles son nuestras necesidades, cuáles son nuestros deseos, son Otros quienes deciden por nosotras.
En este contexto, la categoría joven, que se relaciona con la experiencia específica de nuestras vidas, como por ejemplo haber nacido a fines de los ochenta o a principio de los noventa, crecer y vivir en democracia, observando los procesos de liberalización sociopolíticos, económicos y culturales de nuestro país, han quedado plasmados en nuestras memorias individuales y colectivas.
Lo cual hace, que nos convierta en sujetas políticas capaces de decidir, discernir, elegir, criticar y opinar respecto de nuestro entorno, de nosotras y de los Otros. Aún sabiendo, que Los Otros, digan que no sabemos lo que queremos porque somos jóvenes, inmaduras, cabras chicas, cabras, como si fuésemos animales, y otras descalificaciones que tienen que ver, sólo por el echo de ser jóvenes.
Ese adultocentrismo, que es el poder que ejercen los adultos y las adultas, sobre sujetos y sujetas jóvenes, actúan como dispositivos de poder, que censuran, vigilan y designan deseos que no necesariamente queremos, pero que los hacemos nuestros, por el hecho de que los otros, los adultos o los medios de comunicación, dicen saber más de nosotras, que lo que nosotras, realmente, decimos saber de nosotras mismas, situándonos en la ignorancia misma de nuestra individualidad.
No obstante, existen mujeres y hombres jóvenes que actúan como adultos, y que ejercen un poder autoritario y represivo ante sus mismos compañeros, compañeras, ante sus amigas, ante sus amigos, ante sus parejas, ante sus hermanos y hermanas.
Ese poder coercitivo, que los y las va posicionando en un espacio de superioridad, por aniquilar al otro, a la otra, extermina todas las posibilidades de trabajar en conjunto, de respetar la diversidad entre la multiplicidad de personas que somos, y va limitando los espacios , de nuestra acción política.
De esta manera, el adultocentrismo se va instalando en nuestros cuerpos, para señalarlos, cómo debemos ser, y qué es lo que debemos hacer, en función de los intereses de los otros y no de los nuestros.
Me gustaría detenerme ahora, en la Política. Ese espacio de lucha por el poder, que se vuelve competitivo y que permite desarrollar discursos, estructuras y sujetos capaces de relacionarse en un mismo espacio, por el bien común.
El cuerpo es nuestro primer territorio de ciudadanía, lo que hace, que nuestro cuerpo, y en especial el vientre femenino, se transforme en un campo de disputa política.
Esto, porque el adultocentrismo se encarna en nuestros cuerpos, señalando qué es lo correcto que debemos hacer con él, en función de sus ambiciones, tener hijos e hijas no deseados, vivir la heterosexualidad obligatoria, iniciar el sexo a una edad adulta y madura, imponernos la delgadez como modelo unívoco de belleza, y otras características que van domesticando nuestro cuerpo, como el molde que el adultocentrismo necesita para sobrevivir.
En ese sentido, la aprobación que hizo la Corte de Apelaciones de Santiago el día de ayer, a la libre repartición de la pastilla del día después, o postinor 2, en los consultorios a mujeres jóvenes, mayores de 14 años, sin consentimiento de los padres, es una trasgresión al patriarcado, y una conquista feminista, que hace democráticamente a las mujeres vivir su cuerpo, su sexualidad y su presente.
Democracia señalo, porque según el último informe del Instituto Nacional de Estadísticas, son las mujeres pobres y jóvenes de nuestro país, quienes mayoritariamente se embarazan, y quienes deben postergar sus vidas, a favor de hijos e hijas que tal vez, ellas no planificaron.
En ese sentido, tenemos el derecho humano, a una maternidad deseable, a la Intervención Voluntaria de un Embarazo, al acceso informado de métodos de planificación familiar, a gozar libre y placenteramente nuestra sexualidad, con quien deseemos, y no a censurarnos por optar lo diferente, que la norma social moderna, ha impuesto como verdad.
Todo esto que he señalado, se relaciona con la importancia que tiene el agruparse como mujeres y como jóvenes. Porque nuestras experiencias, nuestras necesidades y nuestras realidades, las únicas que las sabemos somos nosotras, y en relación a eso, son las demandas que debemos levantar.
No debemos permitir que sean los otros, los que tomen las decisiones por nosotras, debemos actuar en conjunto, creando alianzas, también con el mundo adulto, claro está, para que nos entreguen la historia de sus experiencias, y se genere, el intercambio intergeneracional, para la construcción de un mundo más justo, más digno y más verdadero.
Porque, debemos organizarnos para empoderarnos, para luchar por lo que deseamos, tal como lo hicieron nuestras antepasadas en el siglo XIX y XX, tal como lo hicieron nuestras madres, de postergarse ellas a favor de nosotras, y entregarnos las herramientas necesarias para ser las mujeres que hoy somos.
Porque tendremos que compartir el poder, yo las invito, a que subviertan el orden social, a que se organicen en tanto mujeres jóvenes y levanten sus propias demandas, trabajando en conjunto con movimientos sociales y otras estructuras que legitimen sus demandas, tal y como ustedes las plantean, impidiendo que se las reformulen, porque como sujetas políticas y sociales, tienen la misma calidad, el mismo derecho y la misma responsabilidad social, de querer construir el mundo que quieren vivir.
Muchas Gracias.
Encrucijadas de la educación en América Latina: el derecho y la participación
Pablo Venegas C., Coordinador General del Foro Latinoamericano de Políticas Educativas (FLAPE), tiene el agrado de invitar a usted al Seminario Internacional “Encrucijadas de la educación en América Latina: el derecho y la participación”, a realizarse los días 14 y 15 de noviembre, de 9:00 a 18:00 hrs. en la Sala 8 del Centro de Convenciones Diego Portales, Alameda B. O´Higgins 261, Santiago.
En el Seminario se expondrán los resultados de estudios sobre “Derecho a la Educación” y “Participación de la Sociedad Civil en Políticas Educativas”, realizados en cada uno de los países que conforman FLAPE.
Conferencias centrales a cargo de Emir Sader, Secretario General electo de CLACSO; Federico Schuster, Decano Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Bs. Aires; y Juan Ruz , Rector Universidad Academia de Humanismo Cristiano.
Auspicia:Fundación Ford Patrocinan:UNESCO,UNICEF,OEI Organiza: PIIE/FLAPE
Inscripciones al fono: 209.6644. - lponce@academia.cl
PROGRAMA
Martes 14: Derecho a la educación
9:00 - 9:30 Mesa de Apertura (Coordinación general de Flape/PIIE, Fundación Ford, UNESCO, UNICEF, OEI)
9:30 – 10:15 Conferencia I “Estado, mercado y derechos sociales en América Latina: las nuevas fronteras entre lo público y lo privado” (Emir Sader, electo Secretario General de CLACSO)
10:15 – 11:15 Presentación estudios de Brasil (Estela Scheinvar) y México (Miguel Ángel Rodríguez)
11:15 – 11:45 Café
11:45 – 12:45 Presentación estudios de Colombia (Carlos Alberto Lerma) y Nicaragua (Miguel De Castilla)
12:45- 13:30 Preguntas y comentarios del público
13:30- 15:00 Almuerzo
15:00 – 16:30 Presentación estudios de Perú (Gladis Vigo), Argentina (Florencia Finnegan) y Chile (Jesús Redondo)
16:30 – 17:00 Preguntas y comentarios del público
17:00 – 17:30 Café
17:30 – 18:00 Presentación: Síntesis de diagnósticos y propuestas (Pablo Gentili, Coordinador FLAPE-Brasil)
Miércoles 15: Participación de la Sociedad Civil en las políticas en educación
9:00 - 9:45 Conferencia II “Movimientos sociales, participación, ciudadanía y democracia en América Latina” (Federico Schuster, Decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, UBA)
9:45 – 10:45 Presentación estudios de Brasil (Florencia Stubrin – Graça Bollman) y México (Silvia Elena Amador)
10:45 – 11:15 Café
11:15 – 12:15 Presentación estudios de Colombia (Orlando Pulido) y Nicaragua (Rafael Lucio)
12:15 – 13:00 Preguntas y comentarios del público
13:00- 14:30 Almuerzo
14:30 – 15:15 Conferencia III “La participación de la sociedad civil en la generación de políticas en educación” (Juan Ruz, Rector Universidad Academia de Humanismo Cristiano)
15:15 -16:45 Presentación estudios de Perú (Miguel Martínez), Argentina (Ingrid Sverdlick) y Chile (Juan González)
16:45 – 17:30 Preguntas y comentarios del público
17:30 – 18:00 Café
18:00 – 18:30 Presentación: Síntesis de diagnósticos y propuestas (Ingrid Sverdlick, Coordinadora FLAPE- Argentina)
PARTICIPACIÓN POLÍTICA DE LAS MUJERES JÓVENES
Estimados amigos y amigas
Tengo el agrado de invitarles a un panel de conversación sobre la Participación de las Mujeres Jóvenes en Política, a realizarse el día sábado 11 de noviembre de 09.30 a 12.30 en el aula Magna de la Universidad Cardenal Raúl Silva Henríquez ubicada en Jofré 462. Santiago.
Adjunto invitación para que además la puedan difundir